Explotacion agricola en Sevilla, especializada en aceituras de mesa, gordales y de manzanilla, de gran calidad. Aceitunas de Sevilla.

Autovía Sevilla Utrera, A-376, 41700 Dos Hermanas, Sevilla

Quiénes Somos

Inicio | Quiénes Somos

Finca El Chamorro

Finca El Chamorro está situada entre Alcalá de Guadaíra y Dos Hermanas, en la provincia de Sevilla. Con una extensión de 150 hectáreas, la finca se dedica principalmente al cultivo de olivar, destacando las variedades Manzanillo y Gordal. La extensa plantación abraza el majestuoso cortijo que se alza en el corazón de la propiedad y al que da su nombre, Cortijo El Chamorro.

La Finca El Chamorro se erige en una posición geográfica excepcional, estratégicamente ubicada a tan solo 20 minutos de Sevilla. La finca disfruta de un clima agradable, ligeramente más fresco que el de la ciudad, potenciado por el imponente embalse de agua dulce que, siendo su función principal la de aportar agua al riego de la finca, proporciona asimismo un refugio para la vida silvestre, como patos salvajes, garzas y cigüeñas, que hacen de esta finca un santuario natural.

Dos Hermanas: Donde Manzanillo y Gordal Tejen su Historia

Dos Hermanas, en la provincia de Sevilla, se erige como un núcleo vital para los olivares Manzanillo y Gordal, con la Manzanilla Sevillana como su tesoro culinario. Esta ciudad, arraigada en tradiciones y labrada por olivicultores dedicados, es un testamento de la autenticidad del cultivo de aceitunas en la región.

Herencia Olivarera

Los campos ondulantes de olivares que rodean Dos Hermanas cuentan la historia de generaciones dedicadas al cultivo del Manzanillo y la Gordal. Aquí, la tierra se convierte en la musa que da forma a aceitunas de calidad excepcional.

Vínculo con la tradición

Dos Hermanas no solo es un punto de producción, sino también un lazo con la tradición y la cultura local. La comunidad, arraigada en la tierra, mantiene viva la herencia olivarera, transmitiendo conocimientos de generación en generación.

Encuentro con la modernidad

En Dos Hermanas, los olivares Manzanillo y Gordal se encuentran en el cruce entre la tradición y la modernidad. Mientras los olivares reflejan prácticas agrícolas centenarias, la ciudad es un testimonio de la adaptación a los tiempos modernos sin perder la esencia de su patrimonio agrícola.

Ir al contenido